domingo, 26 de febrero de 2012

Duelo




La Música y los poemas escritos que en la naturaleza habitan y que a voluntad se revelan sólo a las personas cuyos ojos curiosos posean la cualidad de dominar el arte de observar, admirar y esperar, pueden brindar mucho más de lo que se pudiera desear.
 Esta noche yo deseo lo imposible, así que de esta manera lleno mis pensamientos de vacío para intentar nublar entre las sombras  del pensamiento a aquella pregunta cuya respuesta está lejos de ser alcanzada, para enterrar las palabras a las que no se les dio la oportunidad de ser expresadas, también para quemar en el olvido los abrazos y las caricias que se aferran como astillas a permanecer presentes, a intentar olvidar los labios en cuya miel mis sentidos encontraban placer, en cuyo cuerpo mi alma se fundía con el fuego interior del deleite.
Hoy me pierdo en el laberinto obscuro e inerte de lo desconocido sólo con la intención de percatarme si aún puedo producir brillo.

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